Nueva huelga en Tragsa para pedir la readmisión de los despedidos por el ERE
El ERE afecta al 5% de la plantilla total de Tragsa, integrada por 10.800 trabajadores, cuando la cifra inicial era de 1.336 despidos previstos.
El Tribunal Supremo avaló el ERE, por unanimidad, porque el expediente era ajustado a Derecho, al entender que concurrían las causas económicas, organizativas y productivas que fija la ley y que se negoció de buena fe por parte de la empresa.
Pese a la resolución judicial, los sindicatos denuncian que Tragsa está ofertando los mismos puestos de trabajo que ha eliminado con el ajuste de plantilla. Argumentan que la empresa es viable pero la dirección quería precarizar el empleo.
Los trabajadores de los sindicatos de la empresa Tragsa se han reunido en modo de huelga ante las Cortes de Castilla para pedir la readmisión de los 555 trabajadores despedidos.
Algunas personas llevaban pancartas en las que se podía leer "En Tragsa sobran políticos, no trabajadores", y en otras "En esta empresa necesitamos trabajadores. Nos sobran políticos".
Incluso algunos de los manifestantes vestían camisetas de color negro en las que estaba escrito: "No a los despidos colectivos en el Grupo Tragsa".
El 21 de enero, la empresa publica Tragsa decidió dar por finalizada han dado por teminada la aplicación del Expediente de Regulación de Empleo, que finalmente ha afectado a 555 trabajadores, lo que representa una reducción del 58 % de los 1.336 despidos autorizados por la sentencia del Tribunal Supremo
La empresa pública ha recordado que "la drástica caída de producción e ingresos del Grupo en más de un 60 % desde 2009, cuya consecuencia fue un resultado de explotación negativo acumulado de más de 70 millones de euros en 2013 y 2014, hizo necesaria en febrero 2013 la puesta en marcha de un Plan de Transformación Global para superar la situación económica y garantizar su futuro.
La empresa ha destacado que, una vez finalizado el ERE, "afrontará su futuro en las mejores condiciones para el cumplimiento de su compromiso de garantía profesional y servicio público".
Además, ha avanzado que mantendrá la presión para revertir las causas del ERE y mantendrá la exigencia de abrir cuanto antes una mesa de diálogo entre la dirección de la empresa y los representantes de los trabajadores para encontrar una solución satisfactoria ante este conflicto.
Tragsa vive una nueva jornada de huelga convocada por todos los sindicatos con representación en la empresa pública. Las centrales sindicales reclaman la readmisión de los 555 trabajadores despedidos por un Expediente de Regulación de Empleo (ERE).
El ERE afecta al 5% de la plantilla total de Tragsa, integrada por 10.800 trabajadores, cuando la cifra inicial era de 1.336 despidos previstos.
El Tribunal Supremo avaló el ERE, por unanimidad, porque el expediente era ajustado a Derecho, al entender que concurrían las causas económicas, organizativas y productivas que fija la ley y que se negoció de buena fe por parte de la empresa.
Pese a la resolución judicial, los sindicatos denuncian que Tragsa está ofertando los mismos puestos de trabajo que ha eliminado con el ajuste de plantilla. Argumentan que la empresa es viable pero la dirección quería precarizar el empleo.
Los trabajadores de los sindicatos de la empresa Tragsa se han reunido en modo de huelga ante las Cortes de Castilla para pedir la readmisión de los 555 trabajadores despedidos.
Algunas personas llevaban pancartas en las que se podía leer "En Tragsa sobran políticos, no trabajadores", y en otras "En esta empresa necesitamos trabajadores. Nos sobran políticos".
Incluso algunos de los manifestantes vestían camisetas de color negro en las que estaba escrito: "No a los despidos colectivos en el Grupo Tragsa".
El 21 de enero, la empresa publica Tragsa decidió dar por finalizada han dado por teminada la aplicación del Expediente de Regulación de Empleo, que finalmente ha afectado a 555 trabajadores, lo que representa una reducción del 58 % de los 1.336 despidos autorizados por la sentencia del Tribunal Supremo
La empresa pública ha recordado que "la drástica caída de producción e ingresos del Grupo en más de un 60 % desde 2009, cuya consecuencia fue un resultado de explotación negativo acumulado de más de 70 millones de euros en 2013 y 2014, hizo necesaria en febrero 2013 la puesta en marcha de un Plan de Transformación Global para superar la situación económica y garantizar su futuro.
La empresa ha destacado que, una vez finalizado el ERE, "afrontará su futuro en las mejores condiciones para el cumplimiento de su compromiso de garantía profesional y servicio público".
Además, ha avanzado que mantendrá la presión para revertir las causas del ERE y mantendrá la exigencia de abrir cuanto antes una mesa de diálogo entre la dirección de la empresa y los representantes de los trabajadores para encontrar una solución satisfactoria ante este conflicto.
Buenas noches Yolanda, me aparecido muy interanste tu articulo porque es una lástima que actualmente se siguen sucediendo eres o procesos similares como consecuencia de la crisis y que está llevando a muchas personas a la indignación, al estrés que acaba influyendo en la vida familiar, un saludo :)
ResponderEliminarMuchas gracias Blanca, es cierto que elegí este articulo porque me sorprendió bastante que personas que no tienen la culpa de la situación que estamos viviendo actualmente tengan que sufrir las consecuencias, no solo en sus puestos de trabajo, sino, como bien has dicho, en su vida familiar y personal.
EliminarBuenas tardes, Yolanda.
ResponderEliminarTe felicito por tu entrada, muy interesante, pues en el tema principal de vuestro blog es necesario conocer cifras/porcentajes para ser más conscientes de las situaciones de las que aquí habláis.
Es lamentable que las propias empresas sean las que quieran sumergir a sus propios trabajadores en situaciones de precariedad, pues estos son quienes, fundamentalmente, la sacan adelante.
Gracias de nuevo.
¡Un saludo!