6 secretos para lidiar con compañeros difíciles en el entorno laboral
1. Identifica su naturaleza
Antes de enfrentar a un compañero de trabajo tóxico es necesario entender cuáles son sus comportamientos y qué busca lograr con ellos. Los ejemplos más comunes son:
-Protagonista: Una persona que se adueña de las conversaciones en juntas y reuniones, impone sus puntos de vista y hace menos los de los demás.
-Informal: Es un clásico de oficina y su principal característica es que no respeta tiempos de entrega, no atiende solicitudes con oportunidad, no llega a tiempo a las reuniones de trabajo, etc.
-Chismoso: Actúa como “espía oficial” de tu jefe y le gusta informar de detalles irrelevantes o información que perjudica a otros.
-Descalificador: Es una persona que nunca está de acuerdo con tus propuestas o ideas.
-Flojo: Es aquel que no realiza sus tareas o lo hace de manera deficiente. Y esto repercute en el trabajo de todo el equipo
-Manipulador: Uno de los más astutos y nocivos. La mayoría tiene una excelente relación con su jefe o Recursos Humanos y además posee alguna de las características anteriores.
Es importante saber que la mayoría de estas actitudes están vinculadas con personas que en su interior tienen baja autoestima y mucha inseguridad. Utilizan estos comportamientos para hacer miserable la vida de otros y sentirse menos insatisfechos consigo mismos.
2. Analiza si el problema es contigo
Un punto clave para neutralizar el efecto que nos produce un colega nocivo es identificar si la agresión es sólo contra nosotros o es un comportamiento regular con otros miembros del equipo.
3. Neutraliza tus emociones
Es normal sentirse agredido cuando un compañero de trabajo tiene un comportamiento grosero o hiriente, sin embargo, la clave para poder responder a la situación es proteger tu autoestima y no permitir que esa persona te haga perder el control de tus emociones.
4. No lo dejes pasar
Un par de actitudes hostiles son suficientes para actuar. Mientras más esperes para poner un alto a un colega fastidioso más trabajo te costará dominar la situación.
5. Evita quejarte con los demás
Comentar con otros lo sucedido te puede hace parecer una persona quejosa y problemática. Si hablar directamente no resuelve el conflicto, la persona apropiada para comentarlo es tu jefe inmediato, con total confidencialidad y sólo si las actitudes de tu compañero o compañera afectan directamente en trabajo.
6. Cuidado con el contrataque
Manejar tus propias emociones y reacciones siempre es la forma más inteligente de controlar a un compañero fastidioso. Enfócate más en ti y menos en él o ella y observa los resultados.
¡Hola Marta!
ResponderEliminarEs verdad que es una lástima que existan compañeros como estos, pero gracias a tus consejos podemos hacerlos frente sin crear nuevos conflictos-
Es un post muy útil.
Un saludo!